Las cofradías peñarandinas siguen cambiando el ajuar de sus imágenes marianas una vez finalizado el mes de diciembre, dedicado a los difuntos, y en el que han vestido de luto y en este caso ha sido el turno de Nuestra Señora de la Misericordia que luce ya ataviada para el Adviento que comienza hoy, 3 de diciembre. La advocación mariana de la cofradía nazarena, la más antigua de la localidad, lleva un manto brocado en color azul y una saya en color ocre con motivos florales con la misma tela en la que se combina el rostrillo y con un pechero de encaje blanco con un alfiler de la Orden Mercedaria. En su mano derecha la Misericordia porta una corona navideña y en la izquierda un pañuelo de encaje y un rosario y todo ello se completa con la corona de plata. Cabe recordar que la Virgen de la Misericordia se venera durante todo el año en la iglesia parroquial de San Miguel Arcángel y puede verse en su altar junto a la puerta de la sacristía.