Hoy viernes 29 de abril, se ha celebrado la Asamblea General de Caja Rural de Salamanca, como corresponde anualmente según sus estatutos, dando cuenta a sus socios y socias de los resultados obtenidos así como de las acciones más representativas realizadas, aprobándose las cuentas por unanimidad y encontrando el respaldo de la gestión realizada.
Durante la Asamblea se renovaron los cargos de Presidencia y cinco vocales, entrando como consejeros Rosa Belén Bonal González y Miguel Ferrero Martín en sustitución de Francisco Javier González Albertos y José Antonio Sánchez Sánchez.
Como Presidente del Consejo Rector de la Entidad, Ernesto Moronta Vicente, ha transmitido el honor de presidir la Asamblea General de Caja Rural de Salamanca y agradecido su reelección junto a la de los consejeros, comprometiéndose al desarrollo socio-económico de Ávila, Valladolid y Salamanca, provincias donde la entidad tiene oficinas físicas.
La Directora General, Isabel Martín Arija, ha hecho un repaso de los datos económicos resaltando un beneficio neto de 5,62 millones de euros aumentando un 44% respecto el año anterior, con un incremento del volumen de negocio de la Caja en un 5% llegando a 1.974 millones de euros.
El crédito a la clientela ha alcanzado 566 millones de euros con un incremento anual de un 1,80%, compone una cartera saneada que sirve de palanca para poder impulsar nuevos proyectos e inversiones. La buena calidad de sus activos crediticios ha permitido recuperar provisiones y además mantener prácticamente en su totalidad el fondo constituido el pasado año para posibles insolvencias derivadas de la crisis Covid.
Los depósitos a la clientela ascienden a 1.074 millones incrementándose un 4,04% que junto con los 249 millones en fondos de inversión y carteras (incremento de un 19% en el ejercicio 2021) refleja la confianza que los clientes tienen en la gestión realizada.
Todo ello, junto con una ratio de morosidad de un 2,10%, una ratio de cobertura de un 83,30% y una ratio de solvencia de un 25,40% demuestran una entidad financiera con una fortaleza y liquidez que la ponen en posición propicia para ese crecimiento plasmado en su Plan Estratégico 2022-2024.
La entidad financiera busca el equilibrio entre los clientes que demandan nuevas herramientas y una innovación necesaria para trabajar desde sus aplicaciones móviles, tablets y ordenadores utilizando los canales digitales, y a su vez, seguir prestando ese servicio personal que la diferencia.
La Política de Sostenibilidad de la Caja impulsa los factores ASG: mejora del medio ambiente, atención a fines sociales y una correcta gobernanza, visualizándose en calidad en la gestión y una transparencia, le aporta valor añadido a la Entidad. Una forma de cumplir este compromiso lo realiza por medio del Fondo de Educación y Promoción para el que destina el 10% del resultado, disponiendo así, de recursos para el fomento de actividades culturales, deportivas y sociales, aparte de aquellas que repercuten en los más vulnerables.