La repentina muerte de Antonio Manjón, miembro y fundador del grupo salmantino Candela, dejó un profundo vacío en todos los que le conocieron y compartieron la alegría que derrochaba y su amor por las sevillanas y El Rocío. Antonio era, ante todo, un hombre bueno, cercano, amigo de sus amigos y un «tío campechano» siempre con una sonrisa en su rostro. Un año después de su fallecimiento, Antonio Manjón será protagonista desde el cielo de un gran y emotivo homenaje que le rendirán en Cantalpino el próximo 11 de febrero y que reunirá a numerosos grupos de cante y baile, solistas y guitarristas que actuarán en el pabellón de la localidad. La entrada será libre y se espera que el recinto se llene de público y de aplausos en una tarde noche donde la música será la gran protagonista y en la que todos estos artistas se reunirán en memoria de Antonio. No faltará, por supuesto, su familia con su amada Loli que le acompañaba en el grupo Candela, sus hijos Fran, Raúl y Piqui junto a sus nietos y sus nueras Shalia, Maripaz y Sandra, porque «no desaparece lo que muere sino lo que se olvida» y Antonio sigue muy presente en todos ellos.