Mancera de Abajo celebra hoy la cuarta y última jornada en este lunes que ha amanecido lluvioso en buena parte de la comarca peñarandina. Las precipitaciones, en algunos momentos bastante intensos, han hecho peligrar la procesión con la imagen de la patrona, la Virgen del Rosario, aunque finalmente ha salido a la calle para llegar hasta la plaza de la Paz y emprender su regreso al templo. Tras la misa oficiada por el párroco Antonio Carreras y el sacerdote e hijo del pueblo Fernando García, los vecinos se han acercado hasta el salón multiusos donde ha tenido lugar un concurrido y animado convite. El alcalde, Juan Carlos Zaballos, acompañado por varios concejales de la Corporación Local, ha agradecido la respuesta vecinal en estas fiestas «chicas» de octubre y ha asegurado que pese a recorrer ahora numerosos pueblos y ciudades por su condición de diputado provincial de Turismo «en ningún sitio me encuentro tan agusto como en mi pueblo».