El Campo de Peñaranda, una de las localidades de la comarca en las que más se festeja la festividad del Corpus, se ha quedado hoy sin procesión por la falta de los típicos altares que durante décadas decoraban sus calles en este día. El alcalde, Hermógenes Terradillos, ha anunciado su intención de recuperar la tradición de cara al próximo año aunque sea el Ayuntamiento el que tenga que tomar la iniciativa y contar, al menos, con un altar y que vuelva a haber procesión. Tras la misa, el grupo de dulzaineros de Mariano Díaz ha encabezado un breve pasacalles hasta la carpa municipal donde el Ayuntamiento ha ofrecido un ágape a los vecinos.