Conrado Sánchez García ya forma parte del privilegiado grupo de los salmantinos más longevos y acaba de celebrar sus 100 años con una gran fiesta llena de sorpresas en la residencia Albertia Babilafuente. Conrado nació el 19 de febrero de 1924 en Villoruela donde creció y empezó a ejercer su oficio de panadero que siguió desarrollando después en Arabayona de Mógica durante más de medio siglo. Dos hijos, tres nietos y tres biznietos son a día de hoy su mayor alegría y su familia coincide en destacar el interés tecnológico del centenario que «prácticamente hasta hace pocos días manejaba perfectamente el ordenador portátil».
«Le gustaba especialmente cantar y lo hizo hasta que falleció mi madre y además ha tenido siempre mucha afición por la lectura y por la escritura», comenta uno de sus hijos. En la fiesta sorpresa en la residencia Albertia Babilafuente no faltaron tampoco la tarta para soplar las velas, la música ni los regalos como una gorra y unos guantes de piel que le entregó una de las trabajadores en nombre de todo el personal y residentes del centro.