La repostería peñarandina ha vuelto a brillar con luz propia, un año más, con la elaboración y venta del típico Roscón de Reyes. Desde primera hora de la mañana de hoy, viernes, han vuelto a repetirse las colas de gente ante pastelerías y obradores artesanales que cada año ofrecen este dulce con el que se cierran las celebraciones navideñas. En algunos momentos la espera se ha prolongado durante cerca de media hora y todo ello bajo el intenso frío que hace hoy pero con la ilusión de compartirlo en familia y ver a quién le tocan las sorpresas que lleva en su interior. El relleno de nata ha vuelto a ser el más demandado entre los clientes peñarandinos y también entre los que han llegado de otras localidades de la comarca y los que han hecho parada obligada en la localidad durante su viaje atraídos siempre por la merecida fama de la mencionada repostería local.