Jesús Cano «Canito», miembro de la reconocida saga hostelera que durante generaciones regentó el emblemático bar La Marciana, muestra ahora en Peñaranda su faceta más desconocida, la de artista, y que esta mañana ha sorprendido gratamente a todos los que se han acercado al Centro de Desarrollo Sociocultural para asistir a la inauguración de su exposición «La química del arte». Óleos y sobre todo 14 obras escultóricas inspiradas algunas de ellas en grandes joyas de la pintura, como por ejemplo el Guernica de Pablo Picasso, captan la mirada por su sorprendente y delicada forma de trabajar metales como el cobre, el latón y el estaño. Jesús Cano ha dedicado esta muestra a su mujer, Maribel, despertando la sonrisa del público al asegurar que en numerosas ocasiones «se ha llevado las esquirlas en las zapatillas» y a otros amigos y conocidos que han vivido de cerca todo el proceso desde su primera obra hasta llegar a esta exposición que puede verse hasta el 19 de enero.