La localidad de Cordovilla, en la comarca de Peñaranda, ha sido un año más fiel a su tradición con una curiosa procesión del Resucitado en la que los niños son los encargados de llevar las andas con la imagen de un Niño Jesús con la cruz. Los adultos han portado la imagen de la Virgen a la que posteriormente se ha quitado el manto de luto para celebrar la alegría de la resurrección. El párroco de la localidad, Manolo Muiños, ha oficiado además la misa dominical.