Los peores pronósticos han vuelto a cumplirse y la «maldición» de las antiguas casas de Camineros de Peñaranda ha provocado una nueva paralización de las obras por el incumplimiento de la empresa adjudicataria, según han confirmado esta misma mañana a NOTICIAS A TIEMPO fuentes de la Junta de Castilla y León. Los vecinos de la zona llevaban ya semanas observando la progresiva ralentización de los trabajos de rehabilitación de las 12 viviendas, ya que las ocho restantes que formaban parte del grupo original, se demolieron y últimamente ni siquiera veían máquinas ni obreros.
El imparable aumento de los costes de materiales está derivando en serios problemas para numerosas empresas del sector de la construcción y trae de cabeza a la propia Junta en varios de los proyectos de construcción o rehabilitación de viviendas que tiene en marcha en estos momentos en la región, como ocurre en Peñaranda. Desde la propia Junta han explicado que el proyecto ha vuelto a sacarse rápidamente a licitación pública y de hecho el plazo para la presentación de ofertas concluye este miércoles al objeto de poder retomar las obras cuanto antes y cumplir el compromiso de que estén acabadas el 31 de diciembre de este año.
Más de 30 años desde el primer proyecto
Nada menos que de principios de los años 90 datan los primeros pasos para recuperar las 20 viviendas del antiguo parque de Obras Públicas, conocidas popularmente como los Camineros, y poder dar respuesta en Peñaranda a la demanda de vivienda social. Aquel primer intento nunca llegó a «buen puerto» y pasaron otros 15 años hasta que en el 2005 la Junta lo retomó con la intención de tener las casas listas en 2007 destinando 1,5 millones de euros para lograrlo. 140 personas se inscribieron entonces para poder optar a una de estas viviendas aunque la adjudicataria dio en quiebra y en la primavera del 2007 las obras se paralizaban definitivamente dejando, de nuevo, las casas abandonadas a su suerte. Cinco años más y numerosas quejas de los vecinos sumadas a las peticiones por parte del Consistorio alertando del peligro que suponía el acceso a las viviendas de transeúntes para buscar refugio o de jóvenes para hacer botellón sirvieron para que la Junta colocara un vallado perimetral para impedir el acceso a la zona. Mientras tanto las casas sufrieron el robo de todo el material de instalaciones que se había llevado a cabo hasta entonces. En diciembre del 2021 la Junta anunció que retomaría la intervención tras venderse en su totalidad las 17 viviendas de nueva construcción en esta misma zona y destinaría a ello casi un millón de euros.
Nueva licitación conjunta
El pasado 25 de enero la Junta licitó la contratación de la finalización de las obras de rehabilitación y mejora de la eficiencia energética de edificio para alquiler de 11 viviendas unifamiliares adosadas en Ciudad Rodrigo (Salamanca), 12 viviendas unifamiliares adosadas en Peñaranda de Bracamonte (Salamanca) y otras 10 viviendas unifamiliares pareadas en El Barco de Ávila (Ávila) con un presupuesto total de 3.952.198 euros y con un plazo de presentación de ofertas que se cerrará este miércoles, día 8 de febrero.
El proyecto de las 12 viviendas de protección pública en alquiler
Se trata de dos conjuntos iguales de viviendas adosadas con 6 viviendas respectivamente en cada bloque, compartiendo el porche de planta baja como acceso común cada dos viviendas. Tienen dos plantas de altura con cubierta plana. En planta baja sus dependencias son: porche, distribuidor, comedor, aseo, cocina y salón, además de un patio exterior privado, y en planta primera: tres dormitorios, baño y distribuidor. Cada vivienda tiene una superficie útil total aproximada de 102 metros cuadrados.