El CEO Miguel Delibes de Macotera abrió ayer sus puertas para recibir a padres, madres e incluso abuelos que, junto a profesores y alumnos, participaron en la Fiesta de la Castaña. Mientras varios voluntarios se encargaban de preparar y asar las castañas en el patio del centro, en el interior los escolares disfrutaban de una serie de manualidades todas elllas relacionadas con este fruto tan propio de estas fechas coloreando dibujos, recortándolos e incluso aprendiendo cómo hacer los cucuruchos de papel en los que siempre se dan las castañas asadas. Tampoco faltó un rico chocolate con bizcochos.
La unión de la comunidad educativa en este tipo de iniciativas tiene siempre un resultado muy positivo y ésta fue una prueba más.