La asociación Villoruela se mueve acaba de sorprender con una original propuesta, en este caso veraniega, que requiere una vez más la implicación ciudadana para lograr el objetivo como ocurre en Navidad con el árbol de materiales reciclados. En este caso Villoruela se mueve pide a los vecinos del pueblo, y a todos aquellos de fuera que quieran colaborar, que aprovechen los restos de lana que encuentren y tejan a ganchillo unos cuadrados de 40×40 centímetros. Una vez entregados a la asociación la idea es unirlos y crear una zona de sombra en la explanada frente a la iglesia parroquial donde tradicionalmente se celebra el remate de banzos en las procesiones, tanto del mes de mayo como del mes de julio.
Éste es el patrón propuesto para tejer el cuadrado a ganchillo bien en un color o en varios. Una vez terminado, debe entregarse a cualquiera de los miembros de la asociación.