«Refugiados sin refugio», cinco voces, una súplica, cinco canciones: así se denomina la actividad con entrada libre que llega este viernes, 1 de diciembre, a las 20:30 horas a la iglesia parroquial de San Miguel de Peñaranda con el grupo «Pilar de la Sota».
Ferchu de Castro, miembro del mencionado grupo, explica que «Llevo desde la gran crisis de refugiados en Europa del año 2015 trabajando con personas migrantes, he estado en Grecia muchas veces y en diferentes sitios, en Atenas, en Tesalónica, en Moria, en Lesbos… y conozco bien esa realidad. Circunstancialmente me encontré con una gente que tenía un coro, cantaban y y se planteó la posibilidad de hacer este concierto en pro de las personas refugiadas y llevamos cuatro años moviéndolo por diferentes lugares, diferentes iglesias, diferentes locales, donde podemos».
«El concierto tiene una estructura sencilla, son canciones, son lecturas de testimonios de personas migrantes y refugiadas y también son testimonios míos algunos de las cuestiones que he vivido en los diferentes campos de refugiados y situaciones en las que he estado. Lo que se trata es de dar a esta gente que no la tiene y de poner el foco en esta circunstancia dramática de millones de personas que ya prácticamente pasa desapercibida para la gente porque las noticias van tan deprisa que no hay lugar para ellos. Señalar eso y que la gente sepa que siguen viniendo, que siguen pasando, que siguen muriendo por centenares en el mar Mediterránero y que Europa se ha amurallado de tal manera que no los queremos. El primer mundo hemos decidido que para que sigamos viviendo como vivimos el resto de la gente tiene que estar fastidiada y entonces no queremos que vengan, no queremos que vengan a darles esa oportunidad de acogida y de intentar tener una vida normalizada cuando, de alguna manera, estamos obligados porque somos el primer mundo y sacamos pecho de nuestra de nuestra situación», añade.
Ferchu de Castro hace, además, hincapié en que «somos la Europa de las libertades y de la acogida pero todo es mentira. Lo que hacemos es que externalizamos fronteras, ponemos pegas, pagamos cantidades ingentes a empresas para que controlen los flujos migratorios, sostenemos gobiernos títeres en esos países para que cumplan nuestros designios y todo ello después de haber ido allí a esos países explotar sus recursos naturales. Nosotros lo único que queremos hacer es poner ese foco, tender un puente hacia ellos y la actuación es gratuita pero, al final, si alguien quiere mostrar su generosidad y su solidaridad económica la recaudación va para una escuela que apoyamos desde aquí para niños menores no acompañados que han llegado a Atenas (Grecia)».
Con respecto a esta escuela, Ferchu de Castro señala que «son niños de más de una veintena nacionalidades, ahora mismo tenemos 80 niños y a partir de la educación en inglés, matemáticas, informática, intentamos darles herramientas para que se puedan enfrentar a la nueva vida que van a tener que vivir porque hablando árabe o hablando Fastum, hablando pakistaní o hablando dialectos de subsaharianos, difícilmente van a poder encontrar una vida mejor en Europa».
El coro que actuará este viernes, 1 de diciembre, en Peñaranda se llama Pilar de la Sota y toma el nombre de «una compañera nuestra que falleció y que nos regaló el nombre y nos regaló una cantidad de experiencias de vida maravillosas y somos un grupo de gente transversalmente, hay de todas las sensibilidades, de todas las opiniones pero que nos juntamos con esta causa común. Desde aquí animar a la gente de Peñaranda que quiera saber que vengan, que escuchen, que sientan con nosotros y que abran sus corazones y que nos ayuden a tender ese puente hacia Grecia, hacia la escuela Habibi Center y hacia todas esas personas que viven esa situación dramática», concluye Ferchu de Castro.