La Hostelería ha sido históricamente y lo sigue siendo un sector clave para la economía de Peñaranda y que aporta merecida fama a la localidad. Los hosteleros han sufrido, además, los terribles efectos de la pandemia covid con el cierre de sus negocios y con una serie de medidas restrictivas que se han venido prolongando en estos últimos dos años. El presidente en funciones de la asociación de Hosteleros de Peñaranda, Iván Zurdo «Galli», reconoce en este sentido que «la pandemia ha sido algo muy duro y aún no hemos acabado. Llevamos dos años en tensión para que no nos toque el covid, cada semana nos decían una cosa, nos cambiaban las normas y eso, te repito, ha sido muy duro para nosotros».
Dos años después del Estado de Alarma y del confinamiento que llegaron en marzo del 2020, el sector intenta ir poco a poco recuperando una normalidad que aún dista mucho de parecerse a lo que se vivía antes de esa fecha. «Los fines de semana estamos funcionando muy bien, al menos te hablo de mi caso, pero la actividad en los días de diario sí se nota que ha bajado. Muchos bares de Peñaranda hemos adelantado el cierre por la noche casi dos horas porque no hay nada. Los viernes y sábados la gente joven responde bien y los domingos tampoco se dan mal en general pero el vermut de la gente mayor, con grupos que venían a diario, ahora lo reducen a un par de días a la semana. Ahora nos enfrentamos, también, a una subida brutal de todo, de la luz, de las bebidas, de los alimentos y de otros gastos y se hace todo más cuesta arriba», asegura Zurdo.
Con respecto a la propia asociación de Hosteleros, Iván Zurdo, reconoce que «estamos como suele decirse en standby, medio parados, y sí me gustaría que volviera a reactivarse y poder recuperar, por ejemplo, el concurso de pinchos en agosto que funcionó muy bien años atrás y para el que ya tengo incluso pensadas nuevas elaboraciones que sorprenderían al público. En todo esto sería bueno contar, de nuevo, con el compañero Helio Flores que es un gran referente en el sector».
Las terrazas en la calle es otro de los asuntos que preocupan a los hosteleros locales de cara a la Semana Santa, especialmente a los que tienen sus locales en el recorrido de los desfiles procesionales. «De cara a Semana Santa esperamos funcionar bien, que vuelva a haber mucha gente en Peñaranda como pasaba siempre y en cuanto a las terrazas tendremos que retirarlas cuando haya procesión y luego volverlas a poner. Cuando pase Semana Santa, con la nueva ordenanza municipal, las tendremos que instalar ya con tarima para poner sobre ella mesas y sillas. En el caso concreto de la calle Ricardo Soriano sólo las podremos tener desde después de Semana Santa a después del día de los Santos, en noviembre, porque en esta zona hay quejas vecinales y es lo que nos ha transmitido el Ayuntamiento como solución así que no sentimos en cierto modo discriminados porque el resto de bares de Peñaranda que así lo quieran sí podrán tener terraza todo el año», concluye el presidente de la asociación de Hosteleros.