El Hermano Mayor de la cofradía nazarena y actual presidente en funciones de la Hermandad de Cofradías de la Semana Santa de Peñaranda, Moisés Pérez, ha avanzado la intención de adquirir la imagen de un sayón para acompañar a Jesús con la cruz a cuestas con el fin de completar el paso y recuperar cómo era en sus orígenes puesto que el citado sayón no se ha conservado hasta nuestros días. Moisés Pérez ha anunciado este proyecto de los nazarenos en el programa oficial de la Semana Santa que ha visto la luz hace unos días y en el que firma uno de los artículos sobre la devoción histórica a la cofradía que preside.
Cabe recordar que la talla de Jesús Nazareno con la cruz a cuestas, obra del escultor Miguel García encargada en el año 1643, permaneció durante años en la sacristía de la iglesia de San Luis en un estado de abandono y deterioro que finalizó en 2012 con el encargo de su restauración a la salmantina Isabel Pantaleón Rodríguez. Desde 2014 es ésta la imagen que desfila y una de las de mayor valor histórico en la Semana Santa local. Este año la imagen ha estrenado, además, dos túnicas «una de color morado bendecida el primer viernes de marzo y otro de color cardenal, bordada en oro que estrenará y se bendecirá la noche del Miércoles Santo antes de la procesión por el párroco, Lauren Sevillano», explica el Hermano Mayor. El bordador salmantino Manuel García Bellido firma ambas túnicas sufragadas por la cofradía.
TRONO DE JESÚS DE MEDINACELI
Por otro lado, la cofradía peñarandina de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Jesús de Medinaceli y Nuestra Señora de la Misericordia ha encargado a la artista Raquel Tosal la finalización del proyecto del paso del Medinaceli en el que desde el año 2018 venía trabajando el recordado Óscar Rodríguez, fallecido en noviembre del 2023. Aprovechando la «igualá» de costaleros y nuevos aspirantes que se llevó a cabo el pasado mes de enero en la Casa de Hermandad de los nazarenos, la propia Raquel Tosal quiso explicar el trabajo que aún resta por hacer y que llevará, como mínimo, otros dos o tres años hasta completar el mencionado paso.
«Llevamos siete años con el proyecto y todos hubiéramos querido que las cosas hubieran salido muchísimo mejor pero han surgido problemas a lo largo de este tiempo, entre ellos una pandemia, y ahora vamos a seguir avanzando en ello, tenemos plena confianza en Raquel para este trabajo», han comentado los costaleros.
«Este año se va a tallar lo que falta de los respiraderos y las piezas que van entre medias del paso, debajo de la cornisa, que serán como unas 280. Para el próximo año espero poder agrandar los espacios donde van los evangelistas y tallar lo que falta del canasto», ha explicado la artista.