Aún con la satisfacción del trabajo bien hecho y de los miles de felicitaciones que se siguen recibiendo desde el pasado sábado tras el belén viviente de Santiago de la Puebla, la plaza Mayor de la localidad ha recobrado hoy la normalidad. Una cuadrilla de voluntarios se ha encargado desde primera hora de la mañana de retirar todos los decorados que acompañaban a las escenas en la representación del nacimiento de Jesús y guardarlo todo debidamente para la próxima edición.
Como curiosidad, cabe recordar que el montaje en sí se inició el 18 de diciembre de cara a la celebración del belén viviente 10 días después y que el desmontaje se ha completado, con maña, fuerza y perfecta coordinación, en unas pocas horas.