No es nada nuevo pero lamentablemente la dejadez en la estación de tren de Peñaranda va a peor y ello ha motivado que arrecien las quejas entre los usuarios que llegan a ella para viajar en los trenes de la línea de media distancia Salamanca-Ávila-Madrid. La máquina automática expendedora de billetes está fuera de servicio, tal y como puede apreciarse en las fotografías, y la pantalla informativa en la que se indica en qué anden parará cada convoy tampoco funciona. «Hay que esperar que la megafonía lo anuncie y si toca cruzar la vía y encima lo haces con maletas el tiempo que tienes es mínimo con el peligro que ello supone», explica una viajera.
La falta de atención presencial en el recinto tampoco ayuda precisamente a facilitar las cosas a los usuarios y además impide, por ejemplo, que los aseos de la sala de espera estén abiertos.