28 de Junio Día Internacional del Orgullo LGBT
«Donde hay amor, hay vida» (Mahatma Gandhi) y José Antonio y Aritz comparten amor y vida en Peñaranda, la localidad en la que viven y donde hoy también se conmemora, como cada 28 de junio el Día Internacional del Orgullo LGTBI+.
-¿Qué supone la celebración del Día del Orgullo LGTBI+ para vosotros?
-La celebración del Orgullo LGTBI+, supone dar voz y visibilidad a un colectivo que, aún hoy, sigue luchando por sus derechos. Y tal cómo van los tiempos es más necesario que nunca. Estamos viendo cómo instituciones públicas, que están para representar a todos los ciudadanos, empiezan a restar derechos, modificar o derogar leyes que lo único que hacen es equiparar a todos los ciudadanos por igual. Cuando es necesario legislar para garantizar derechos humanos es que aún queda mucho por hacer. Los delitos de odio han aumentado en un 130 por ciento en el último año y estamos viendo que se sienten amparados por determinados discursos.
Ahora más que nunca el Orgullo debe ser visible y reivindicativo. El orgullo LGTBI+ no es sólo la lucha por conseguir derechos un mes al año, el Orgullo son los 365 días del año, ya que por mucha aparente normalidad con la que se quiera dar, todos sabemos que no es real.
-En un municipio como Peñaranda, ¿cómo es vuestro día a día?, ¿habéis sentido alguna vez algún tipo de rechazo por vuestra condición sexual?
-El colectivo LGTBI+ lo que quiere es que esa normalidad se muestre a diario. Para nosotros vivir en una población como Peñaranda, es como una normalidad, hacemos nuestras compras igual que todo el mundo de la población, participamos en actividades siempre que nuestros trabajos lo permiten, y vivimos igual que cualquier ciudadano. Por suerte Peñaranda es una población inclusiva, el apoyo institucional con el colectivo LGTBI+ es visible y cada año intenta dar un paso adelante y nosotros, como ya saben, estamos abiertos a colaborar y contribuir en todo lo que podamos. La lucha por la igualdad se consigue con pequeños gestos, que en otros lugares están quitando o restringiendo. Claro que en alguna ocasión hemos sentido algún tipo de rechazo, pasar por una terraza y que comenten, o que vayas agarrado de tu marido y te miren. Muchas veces la homofobia no se refleja con insultos o agresiones, la mayoría de las veces lo ves reflejado en las miradas o en determinados comentarios. En el siglo XXI debemos asumir que existe la diversidad y que se debe erradicar cualquier tipo de discriminación por tu orientación sexual. Peñaranda tiene las mismas características que cualquier población, nosotros nos mostramos tal como somos y orgullosos de ser como somos.
-Desde vuestro punto de vista, ¿en qué aspectos hay que seguir luchando para lograr la igualdad plena?
-La igualdad plena se conseguirá cuando no sea necesario revindicar nada, porque será el momento en que todo tipo de diversidad será asumida y respetada por la sociedad. Estamos viviendo tiempos de retroceso, es necesario seguir luchando por no volver atrás. Es necesario que en todas las familias, comunidades escolares, instituciones, etc se asuma la diversidad actual. Todavía hay un rechazo a aquello que según la moralidad impuesta es distinto.
-¿Creéis que en la España rural sigue siendo complicado romper estereotipos relacionados con vuestro colectivo?, ¿es importante servir de ejemplo?
-En los ámbitos rurales es más difícil mostrarte cómo eres, siempre hay prejuicios familiares, laborales…. que te impiden mostrarte. De hecho desde hace unos años se hace especial hincapié con campañas para evitar el «sexilio», el tener que irte fuera, apartarte de tus raíces «por el qué dirán». Todos conocemos casos de familiares o amigos que dentro de las poblaciones rurales continúan «dentro del armario» en estos ámbitos. Nosotros nunca nos hemos sentido ejemplo, pero siempre nos hemos mostrado visibles, en ningún momento nos ocultamos, todo el mundo sabe que somos un matrimonio de dos hombres, nuestra felicidad está por encima de todo. Si con nuestro ejemplo y visibilidad ayudamos a otros estupendo. No es momento de ocultarse, es momento de salir a la calle, de reivindicar lo conseguido, que todo el esfuerzo de aquellos y aquellas que un día se mostraron y se pusieron al frente de la lucha por los derechos LGTBI no quede en vacío.