Carlos Vicente es un «viejo» conocido en Peñaranda donde pasó parte de su infancia y donde volvió hace unos años para coordinar la actividad cultural de la localidad en una etapa muy fructífera a la vez que repleta de retos. Autor, director y actor de teatro, facetas que le motivan y apasionan, Carlos Vicente ha regresado a la comarca, concretamente a Zorita de la Frontera, donde encuentra paz, sosiego y unos vecinos encantados de acercarse al teatro a través de la ilusión que les transmite. Mañana, viernes, a las 20:30 horas, Carlos Vicente se subirá una vez más al escenario del teatro Calderón, de Peñaranda, como uno de los protagonistas de «Pollos, tórtolas y perniles. Almuerzo en casa de la Celestina», de la mano de Edulogic Producciones. «Disfruta», su frase favorita en el día a día, se hará más que nunca presente en el público que precisamente podrá disfrutar de una de las obras más esperadas del semestre de artes escénicas en la localidad peñarandina.
-¿En qué momento te encuentras ahora dentro de tu faceta como actor?, ¿qué retos tienes?
-Estoy, creo, en un momento de madurez y tranquilidad gracias a la edad y la experiencia y a mis compañeros de Edulogic Producciones. Ello hace que disfrute muchísimo más cada vez que subo al escenario. Es muy satisfactorio. Aunque mi reto es escribir cada vez más y mejor y dirigir. Me apasiona.
-Vivir “a caballo” entre la ciudad y el medio rural, ¿qué aporta a tu alma inquieta?, ¿cómo vives el acercar al teatro a tus vecinos de un pequeño pueblo de apenas 150 habitantes?
-El teatro es plantear preguntas y contar historias y en Zorita de la Frontera uno se inspira para hacerlo y además, hay gente maravillosa que te enseña muchas cosas. Conoces otros puntos vista y otras formas de ver la vida. Entiendes cosas que en una capital o en Malasaña no se ven. Todos deberíamos entender los diferentes ritmos y demandas de la vida rural. Y como el teatro es también texto y el texto es ritmo…
-Este viernes vuelves a Peñaranda con una adaptación de la Celestina, ¿cómo imaginarías a una Celestina en pleno siglo XXI?
-La Celestina del siglo XXI es el chat GPT y vive en el metaverso…
-Durante algunos años trabajaste y experimentaste en primera persona la gran revolución cultural que hubo en Peñaranda, ¿cómo lo ves ahora?, ¿Qué echas en falta?
-Echo en falta los medios económicos y humanos que hicieron posible eso. Y la ilusión que se ve veía en la gente. Y el deseo de cultura que había en aquella época.
-Si tuvieras que elegir un personaje de los que has dado vida, ¿cuál sería?
-Toni Cuenca, el protagonista de «Antes muerto que tuno» porque fue mi primer papel profesional; Ángel, de «Interior noche» por lo que me ha hecho crecer junto a Patricia Sánchez y Carlos San Jorge, y el presentador del «Gran Café Teatro» por lo que eso significa en Salamanca.
