Un excursionista español, nacido en 1986 y residente en Londres, ha sido encontrado muerto este martes en los Dolomitas, en los Alpes italianos, después de extraviarse mientras recorría una ruta en solitario. La víctima es el hijo menor del médico Agustín Garzón que ejerció como facultativo durante varios años en la Zona Básica de Salud de Peñaranda, concretamente en las localidades de Ventosa del Río Almar, Alconada, Villar de Gallimazo y Peñaranda, para posteriormente trasladarse a la capital salmantina donde se jubiló el pasado mes de febrero, tal y como han comentado algunos de sus compañeros. La noticia ha generado la lógica conmoción entre el personal del centro de salud peñarandino que se ha sumado al dolor de la familia y le ha transmitido sus condolencias.
«Era un joven ejemplar, vivía en Londres, fue número uno en su promoción de Farmacia y Bioquímica y le acababan de nombrar investigador principal en Cambridge. Además, le encantaba el senderismo» comentan entre el círculo profesional más próximo al doctor Agustín Garzón. «A través de un mensaje de whatsapp Agustín nos ha explicado que su hijo se fue a los Dolomitas el día 23 a una ruta de senderismo por Alpes italianos de unos 15 kilómetros cada día, de refugio en refugio por etapas, la última prevista para el sábado porque el domingo volvía desde Venecia a Londres para empezar a trabajar el lunes. Después de darles los buenos días del sábado no les mandó nada más, les había dicho que no se preocuparan porque tenía poca cobertura, pero al no decirles desde el aeropuerto de Venecia nada el domingo y no les cogía el teléfono, ni la compañía les daba datos de embarque por la confidencialidad, fueron a la Policía a denunciar la desaparición», comentan sus antiguos compañeros. «Por lo visto hasta el lunes no comenzaron los trámites de busca a través de denuncia a Embajada española en Italia y al Consulado de Milán, a los Carabinieri a la empresa organizadora y la familia les decían constantemente que utilizaran un geolocalizador porque el móvil daba llamada pero a la quinta saltaba el contestador», añaden. Después de tres días de angustia, el desenlace ha tenido, finalmente, el peor de los finales ya que, según dicen los Carabinieri, el joven se equivocó de ruta y cayó por un barranco de 50 metros.
Otros medios confirman, también, que la búsqueda se inició este lunes, a petición de su hermano, que alertó que su familiar no se había presentado a trabajar a su puesto, en Londres. El fallecido, del que no ha trascendido su identidad, ha sido encontrado en un punto de la Alta Vía número 1 de los Dolomitas. Los rescatistas han explicado que tomó un camino equivocado en una bifurcación y acabó cayendo por un precipicio de unos 50 metros. Según los medios italianos, el excursionista había pasado la noche en el refugio Pramperet el pasado viernes, y el sábado salió en dirección de la localidad de Belluno (a 80 kilómetros al norte de Venecia) pero nunca llegó. Siguiendo los rastros del teléfono móvil, y usando los datos registrados por las antenas repetidoras de la zona, la búsqueda se restringió a una zona a la que se dirigió un helicóptero de Protección Civil de la Región del Véneto con un equipo de rescatistas y bomberos. Estos colocaron en una cumbre cercana un dispositivo portátil que simula ser una antena de móviles y así captaron la señal y la ubicación aproximada del teléfono del desaparecido. Finalmente, a las 9.40 de ese martes, un equipo de rescate que recorría la zona a pie avistó el cuerpo del senderista, que ha sido trasladado en helicóptero. Fuentes de Exteriores han informado a Europa Press de que el Consulado General en Milán está a cargo de los trámites y en contacto con la familia del fallecido, para asistirles en lo que sea necesario en estas circunstancias.
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