La gastronomía peñarandina tiene históricamente una merecida fama pero también tiene ya relevo asegurado con jóvenes promesas que están llevando el nombre de nuestra ciudad por todo el mundo. Es el caso de Álvaro Plaza Ramos que el próximo 28 de abril representará a España en la República Checa en la prestigiosa Copa Internacional de Chefs 22 que se celebrará en Praga. Se trata en este caso de una competición culinaria organizada por Aramark en la que chefs de todo el mundo compiten por ganar la copa internacional con sus mejores dotes gastronómicas. Al finalizar la jornada, se celebrará una gala donde se anunciará el ganador y se hará entrega de los diferentes premios.
En esta edición compiten nueve países: Alemania, Irlanda, Reino Unido, España, Latinoamérica, Bélgica/Luxemburgo, Corea del Sur, Canadá y República Checa, Canadá y República Checa, éste último el anfitrión del evento que ha sido suspendido durante dos años consecutivos debido a la covid-19 y que vuelve a celebrarse con una mayor participación de países y con muchísimas ganas e ilusión por volver a reunir a los mejores chefs de la compañía. España estará representada por el chef peñarandino Álvaro Plaza Ramos, de la Ciudad Deportiva del Atlético de Madrid y Alberto Moreno, del Wanda Metropolitano, que viajará como ayudante de Álvaro formando un dueto con muchas opciones de ganar, según explican desde el grupo internacional Aramark.
Un chef formado entre «grandes estrellas»
Álvaro Plaza Ramos comenta para NOTICIAS A TIEMPO parte de su intensa trayectoria profesional y de sus metas a corto plazo.
-Para los que, como yo, te hemos perdido la pista como peñarandino, ¿cómo ha sido tu llegada al mundo de la cocina, cuáles han sido tus primeros pasos y dónde?
-Estudié en el Hotel Escuela de la Comunidad de Madrid. Cuando acabé los estudios de Dirección y Gestión de Cocina me fui a Tenerife a hacer unas prácticas y me quedé allí trabajando casi dos años. De Tenerife quise seguir formándome, aún teniendo trabajo, y decidí irme a hacer un “stage” (prácticas) a Etxanove, que es un restaurante de Bilbao de cocina tradicional y moderna y con estrella Michelín. Antes de finalizar, Fernando Canales, el chef, quiso que me quedara en el equipo y me quedé un añito trabajando. Mi intención fue la de continuar formándome así que me fui a DSTAgE, restaurante de Diego Guerrero, con dos estrellas Michelín, en Madrid aunque en un breve intervalo anterior de tres meses estuve en con Héctor Carabias, de Macotera, chef en Oroviejo, con Héctor Carabias, de Macotera. En Dstage, al finalizar las prácticas, Diego me consiguió un puesto de segundo de cocina en Lúa, otro restaurante con estrella Michelín en Madrid, y de ahí a Taberna Recreo Espartinas. Diego Guerrero volvió a llamarme para contratarme para Dstage, donde he estado hasta el año pasado que empecé en Adamark, una compañía multinacional dedicada a colectividades, ocio y restauración en general. Adamark abría en ese momento un restaurante especializado en brasas en la Ciudad Deportiva del Atlético de Madrid Restaurante y en él estoy.
-¿Cómo surgió la oportunidad de participar en la Copa de Chefs en Praga?
-El jefe de ocio de Aramark España confió en mí y me lo ofreció para que fuera a representarles a nivel internacional en Praga y el día 28 de abril competiré allí con chefs de otras partes del mundo.
-¿Qué es lo que te motiva más a la hora de desarrollar tu trabajo entre fogones?
-Me gusta mucho la cocina. Mi meta es seguir creciendo, no ponerme un límite. Me gusta mucho probar cosas nuevas, hacer muchas pruebas, siempre basándome en la cocina tradicional con algunos cambios.